Abandonado en un paradero solitario con frio y sin abrigo, prefieres huir entre noches de fantasías de constante opulencia. Crees que me matas con tu adiós, te equivocas ¡otra vez! Estaré solo si, pero feliz de ya no tragarme tu amor a sorbos y esperar por respuestas que nunca dices y preguntar si me quieres. Ojala te vayas tan lejos que mis pensamientos nunca te toquen, porque ahora solo quiero demorarme en borrarte de mi alma y de mi cuerpo.
Si más allá del infinito puede nacer ese estigma que atiborre tus labios envenenados, pues me arrancaré de este mundo impar que solo me trajo ilusiones desbordadas. Tu belleza tan solo era un matiz de tu maldad. Tus manos eran canciones que en su lirica acariciaban mis sueños. Tus besos con el tiempo era acaso un pacto con ese momento que cercenó mi corazón en su abadía silenciosa, profana, sin estética más que tus ojos.
Creer en ti es como alabar a un demonio con falda, está llena de mentiras que lanzas como dardos que brutalmente perforan mi corazón, sin embargo no me lastima ¡ya no! Por fin te saque la máscara y vi tu real apariencia de niña sombría exorcizo de mi ser tus besos falaces y tus te quiero impíos.
Por fin ya no compraré esas noches donde me hacías sentir Dios. Esas noches que la luna lamia nuestros cuerpos llenos de excitación y locura. Esas noches que con tus gritos arañabas las voces de los grillos. En esa cama que fue un testigo ocular de esas tardes que planeábamos guardar el universo en un cenicero. Ahora mi habitación se obnubila por esos recuerdos explotando en mi pecho.
Siempre me quedare con tu recuerdo que se disuelve entre mis llamas de pasión, quemare tus abrazos en un fogón infernal y tus te extraño los borrare con alcohol. Piérdete en mi mente y no salgas más, disuélvete en mi llanto para saber que esta fuera de mí. Caeré del abismo de tu ausencia y moriré en tu olvido, junto a los demás cuerpos inertes que guardas como trofeos lujuriosos en tu corazón negro.
¿Dime que te llevas contigo? ¿Un corazón de papel que ardió entre tu sonrisa de gasolina? ¿Ese recuerdo de creer haber hecho una cárcel con nuestras manos para atrapar esa magia en cada latido? Dime si alguna vez al decir TE AMO quisiste llorar de tanto amar, de tanta impotencia de querer hacer de tus palabras plastilina para moldear ese sentimiento que no cavia ni en tu pecho ni el cielo. Porque eso era lo que sentía.
ArtePerdido en colaboración con EcoJuliet
4 comentarios:
espero que no sea la ultima vez q escribimos juntos..alvaro
de todas maneras, tendremos harto para escribir, ideas, locuras y demás.
¿Un corazón de papel que ardió entre tu sonrisa de gasolina?
esta frase si quiera me da ánimos
por que los dos sabemos q sigue siendo una HD(las mil)P
ke alaz nero xD
Publicar un comentario