Imaginaria

Sin ti, aún podría vivir. Pero no es lo mismo.

Si te vas el mundo no dejará de girar. El reloj nunca aprenderá a dar marcha atrás. Las noches, por las tardes, seguirán saliendo y el frio limeño podría ser un poco más helado, incluso.

Si me odias, no habrá retroalimentación. Cortázar seguirá siendo cursi y Picasso un niño que aún pinta en la carpeta de un colegio estatal.

Si me dejas de besar, la noche seguirá colándose afilada por mi ventanal. La razón no encontraría sentido en mi cráneo. Los focos de tungsteno en el cielo seguirán prendiéndose cuando el sol esté aburrido y apagado.

Si dejamos de hacer el amor, tal vez realice simulacros los domingos y feriados. Tenga más tiempo para hacer crucigramas, o leer las noticias del día y no las del día de ayer.

Si hacemos como si nunca hubieras existido, aun podría vivir. Acosado por mis demonios internos y mí conciencia psicopática. De seguro que te inventaría en un maniquí, o te sacaría de la mente de un niño que te hizo su amiga imaginaria, o te secuestro del sueño de una niña que te hizo un hada. Pero no es lo mismo.

Mi dulce estrategia

Sentenciando momentos fortuitos, murallas enajenadas y tus ojos mi razón
Encadenando letras capaces, reclamando sospechas fugases y remolco a tu filmación
Descubriendo meridianos, extrañando soledades y perjurando de tu nombre
Eres como una perfección errante, un tul rumiante y yo solo un procaz hombre

Describiendo descripciones, mañana sin emociones y manejando el arcabuz
Solo veo un vidrio transparente y como si fuera de repente entras sin más ni plus
A un exilio orgánico, midiendo metamorfosis y aclarando alba dioses
A una compleja epidermis, de una frente de fotos que ojalá no la repases

Fracasando en mis letras vulgares, como sueños arrastrares y un trabajo mediático
Vendiendo emociones a los mejores postores y serpenteando al doctor espermático
Careciendo de rocíos sin mas remedio que huir a pistas enredadas de miel
Bofeteando mis segundos sin frontera y reclutando a tu perfume en mi piel

Ahora sin una escuadra de pociones farólicas que envidiarían la expedición
De una nariz que recorre de costa a costa tu excitación
Tal vez estas cosas nunca te las dije mientras el blues cantaba
Es que es una estrategia muy dulce y suntuosa la que utilizaba…

Katerin Muriel

Amo tus ojos cerrados ajenos al mundo, con tus manos buscando mis manos para apretarlas y sentirte segura. Todo para ti debe ser extraño, espero que satisfacer tus futuros Por que’s. Me gusta ser el guardián cotidiano de tus sueños ingobernables, abrazarte de noche cuando despiertes llorando y, aunque no sepa cantar, le ponga melodía a mis palabras apenas rozando tu oído. Y aunque tal vez no entiendas… nunca estarás sola. No sabes hablar pero nunca dejaré de entenderte, incluso si no dices nada. Solo podría cambiar tu sonrisa de las mañanas por tus balbuceos de las tardes o tus juegos de las noches. Me miras. Te miro. Eres tan rosa, tan pequeña, tan perfecta para ser el comienzo de una parte de mi vida llamada felicidad. Y yo que pensaba que mi mejor poema estaría en un papel… y no caminando hacia mí aprendiendo a decir papá.

Mañana no estaré

Eres más que una sonrisa bonita, que un atajo a la locura

Sueles caminar de prisa con tu risa secreta haciéndome correr

Tu mirada agachada y rendida, tus manos dibujando mis días

Son la justificación más precisa del esteticismo del lugar... y de mi vida.

Tu boca jugando a la niña mayor, tu cuerpo sin el botón de apagado

Este infierno de costado buscando su razón por error.

Eres la luna de un agosto indocumentado, de la noche atada

Lo perfecto a tu lado es un concepto estafado

Me dan ganas de preguntarte si eres real

Si acaso es posible acercarme sin sentir un pecado mortal

Para mi tú no eres obra del ser humano, y esto va más allá de Dios

Va más allá de cualquier configuración, e incluso de los espasmos

quien diria... que me besas, ahora que aún estás

aunque te dije Mañana no estaré

y tu respondiste Entonces quedate hasta mañana

¿Quién puede rebatir tamaño argumento persuasor?

Solo espero que el Mañana venga otro dia..

Numen

Tú, ahora no estás,
Entonces
¿A quién besaré cuando esté enamorado?
Más no besaré el invierno en tu nariz
O tus pechos, ni Lima gris.

A la maldita poesía me que nos sobra,
Nadie más cabrá, y es que me mostraba insano
Nadie me entendía incluso lo que de mi no conocía
Y fácil que también al revés.

Cambiando de tema, ahora que no estás,
¿Olvidaré los rincones de mi casa? ¿O acaso
No habrá razón para que mi sofá nos esperé otra vez?

Recordando tus palabras...
(Es aquí donde me pongo más cursi de lo normal)
Contando los minutos infinitos, los segundos sin frontera
Lamiendo el ego perdido, el arte vegetariano
¿Acaso es mucho pedir acostarme teniéndote para soñar?
Mañana no existiré si antes de
Abrir los ojos al despertar, primero no haya pensado en ti
Cada vez me doy más cuenta de lo perdido
Incluso tu voz me parece tan lejana
O será que solo queda el eco… de todas formas, recordarte
No hará que vuelvas a mí.